Terapia Anomalías no Estrábicas

centro de terapia visual

Hoy en dia, son muchos los niños que refieren dificultad con las pizarras digitales y los cambios de mirada del pupitre a la pantalla electrónica, dificultades en la lecto-escritura, visión borrosa a diferentes distancias, problemas con la visión en 3 dimensiones (3D), etc.  Dependiendo del tipo de disfunción o problema visual encontramos que se puede ver perjudicada, la acomodación (capacidad para enfocar objetos a cualquier distancia), la oculomotricidad (movimiento ocular correcto) y la binocularidad (coordinación precisa de ambos ojos).

Conocemos acomodación como la capacidad del ojo para enfocar objetos con nitidez a cualquier distancia. Para que funcione correctamente, debemos contar con una buena amplitud de acomodación, que nos permite realizar tareas de fijación prolongadas sin que aparezcan síntomas secundarios, y además debemos tener una buena flexibilidad de enfoque, que nos asegura que los cambios en el enfoque de lejos a cerca y viceversa, se hacen con rapidez y eficacia.

Acomodación Visual

Como consecuencia de no utilizar correctamente la acomodación se pueden presentar una serie de síntomas que enumeramos a continuación:

  • Fatiga visual o dolores de cabeza durante o después de la lecto-escritura.
  • Parpadeo excesivo
  • Enrojecimiento ocular después de leer/escribir
  • Aumento del tiempo ocupado en copiar de la pizarra
  • Rechazo a la realización de tareas en distancias cercanas
  • Problemas de comprensión lectora
  • Visión borrosa

Con los ejercicios de terapia visual destinados a mejorar la acomodación tenemos como objetivo principal el igualar la capacidad para enfocar con cada ojo por separado para finalmente realizar un enfoque efectivo de ambos ojos a la vez y a cualquier distancia.

Oculomotricidad

Por otro lado, la oculomotricidad es la capacidad para mover los ojos de manera apropiada. Si la oculomotricidad es la adecuada vamos a ser capaces de seguir un objeto, cambiar de línea en le lectura o cambiar la mirada de un objeto a otro.

Para comprobar que esta capacidad no se encuentra afectada debemos de examinar y entrenar los movimientos oculares de manera precisa, centrándonos en tratar las fijaciones (mirar con eficacia un objeto), seguimientos (observar objetos en movimiento y sacádicos (dirigir la mirada de un objetos a otro de manera precisa).

En el caso de encontrarse afectada la oculomotricidad pueden aparecer los siguientes problemas:

  • Necesita ayuda de su dedo para seguir la línea de lectura.
  • Omite o salta palabras o líneas al leer.
  • Refiere mareos cuando viaja en el coche.
  • Tiene afectada la velocidad lectora.
  • Baja comprensión lectora.
  • Traspone letras o palabras cometiendo errores al copiar de la pizarra.
  • Refiere visión doble ocasional.
  • Tiene mala caligrafía.
  • Se acerca o se leja demasiado para leer o escribir.
  • Presenta dificultades de atención.

En este caso, la terapia visual  pretende mejorar el movimientos de los ojos para que se realicen de manera precisa y que así mejore el rendimiento escolar  y psicomotricidad.

Binocularidad

Por último, otra de las capacidades que pueden afectadas y que son susceptibles de la terapia visual es la binocularidad, que consiste en que los dos ojos sean capaces de trabajan a la vez de forma coordinada y precisa, provocando finalmente un mejor confort visual

Para que esta capacidad no se vea afecta debemos de mantener un correcto alineamiento de los ojos en todas las posiciones de los ojos, una correcta convergencia y divergencia (capacidad de juntar o separar los ojos cuando miramos a un objeto lejano o cercano) y una perfecta estereopsis (correcta fusión de las imágenes de los dos ojos percibidas en tres dimensiones, permitiendo tener visión en profundidad)

Si la binocularidad no se realiza correctamente puede que se produzcan en nuestro paciente los siguientes efectos:

  • Desviación de un ojo o ambos (estrabismo)
  • Cierra o se tapa un ojo para ver mejor.
  • Visión doble constante u ocasional
  • Estereopsis reducida (Visión en 3D)
  • Supresión de la visión de un ojo
  • Fatiga visual o dolores de cabeza
  • Rechazo a la realización de tareas en distancias cercanas
  • Reducida comprensión lectora
  • Frotamiento ocular excesivo
  • Adopta posturas corporales anómalas al leer o escribir.

En este último caso la terapia visual comienza con ejercicios para mejorar los movimientos oculares y el enfoque de manera monocular para así conseguir después una rehabilitación visual completa de la visión binocular y visión en profundidad (visión en 3D).

Dado que cada niño puede presentar un problema visual diferente, se diseña una terapia personalizada con una duración diaria de 15-20 minutos de ejercicios para casa y se les facilita una estimación del número de sesiones que necesitará realizar en nuestro centro de terapia visual para completar dicha terapia, cuya duración sera de 60 minutos por sesión. Además, se les entrega un informe del análisis visual completo y los resultados que presenta nuestro paciente comparándolos con  los de una población sin problemas visuales