¿Qué es una Prótesis Ocular?

prótesis ocular personalizada

La prótesis ocular es el reemplazo estético del ojo, por la falta total o parcial del mismo, en personas que han sufrido un traumatismo o enfermedad grave en dicho órgano. Se fabrican con material acrílico antialérgico que garantiza un porte cómodo y el efecto estético deseado.

Tras  la operación, el cirujano colocará un conformador ocular que evitará la retracción de los tejidos. Aproximadamente, después de 4 ó 6 semanas, el estado de la cavidad será óptimo para comenzar el estudio de la adaptación protésica.

Elaboración de una Prótesis Ocular

Según el tipo de operación, y tras el alta médica, se elige un tipo u otro de prótesis.

Se fabrican bajo prescripción de un óptico-optometrista u oftalmólogo y según los requisitos del Anexo I del RD/1591/2009 del 16 de octubre que regula los productos sanitarios a medida.

Son elaboradas individualmente y reproducidas fielmente con las características del ojo sano: volumen, forma, color y otros detalles. El color del iris es realizado de forma artesanal, copiando cada una de las zonas, aureola, estroma y limbo esclerocorneal. La parte interna de la prótesis “copia” la zona de la cavidad, consiguiendo mayor movilidad.

Adaptación de una Prótesis Ocular

El procedimiento para la adaptación de una prótesis ocular es diferente en caso de pacientes portadores, o recién intervenidos. Éstos últimos se van a enfrentar a un proceso nuevo, donde el trato, la comunicación ocularista- paciente y la dedicación son primordiales.

  • Pacientes portadores: en la primera visita seleccionamos la nueva forma, muestras de color y esclera, en un plazo de tres semanas, nos pondremos en contacto con el paciente para entregarle la definitiva.
  • Pacientes recién intervenidos: en una primera visita realizamos anamnesis, evaluamos los tejidos y procedemos a la retirada del conformador.

Procedimiento, tiempos y plazos

Si la cavidad se encuentra en buen estado, vamos a intentar dejarle una prótesis, lo más parecida posible a su ojo contralateral. Seleccionamos diámetro de iris, pupila, muestra de esclera y vascularización y muestras de color para ir elaborando, de manera individualizada, el propio del paciente y en la siguiente visita poder comprobarlo.  En esta primera visita no se coge la forma definitiva, en los primeros meses de la intervención la conjuntiva va a experimentar una serie de cambios, que haría que se quedase pequeña. Pasadas tres semanas desde la primera visita, acude a revisión, el ocularista evalúa la superficie conjuntival y la adaptación, si lo ve conveniente coge la forma definitiva.

En un plazo de tres semanas nos pondremos en contacto con el paciente para hacerle entrega de la prótesis, que en un principio, será la definitiva.

Como norma general, realizaremos una primera revisión al mes, y luego de manera semestral.

El proceso lo repetiremos cuantas veces sea necesario, hasta obtener el mayor grado de parecido con el ojo contralateral.

Beneficios de una Prótesis Ocular

No es una medida puramente cosmética, favorece el desarrollo psicosocial, y permite ejercitar nuevamente funciones, como el parpadeo o el flujo lagrimal por la vía natural.

Una prótesis ocular evita la retracción de los tejidos y sirve de protección contra la entrada de cuerpos extraños.

Su uso es externo y es manejada por los mismos usuarios, en la primera visita, se le explica cómo manipularla, el cuidado y limpieza de la misma, y los consejos de higiene ocular durante el porte.

Número de licencia sanitaria de fabricación de productos sanitarios a medida: MU – 026 – PS